jueves, 13 de noviembre de 2025

Cabeço de Vide – Alter do Chão


Este año volvemos al Alentejo Walking Festival - Caminhadas do Alentejo, para hacer la Etapa 15 del Caminho Nascente dos Caminhos de Santiago que transcurre entre Cabeço de Vide y Alter do Chão, en nuestro caso comenzamos en las Termas da Sulfúrea de Cabeço de Vide. Son unos 13 kilómetros de dificultad baja que transcurre casi toda ella por caminos en buen estado. El track se encuentra disponible en WIKILOC.

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A la salida de las termas cruzamos la carretera y giramos a la izquierda por una calle asfaltada, desviándonos de nuevo a la izquierda, ahora ya en un camino de tierra. Cruzamos una puerta que nos da acceso a la finca Monte das Ferrarias, llegamos a las instalaciones del monte que cruzamos, vigilados atentamente por los perros del lugar. Poco después, salimos de la finca y entramos en el municipio de Alter do Chão. Después de un kilómetro de bosque de pinos, giramos a la derecha hacia un campo de cereales, en este punto es el único lugar donde el camino algo mal definido, giramos a la izquierda hasta cruzar un pequeño arroyo.




Ahora caminamos a través de monte disperso, observados por decenas de cabezas de ganado subimos una colina hasta el camino privado de la finca, que cruzamos. Después de pasar por una puerta lateral, salimos de la propiedad directamente al centro de este tranquilo pueblo, Alter Pedroso, en la Rua do Forno. Pasamos por la iglesia, pero no salimos del pueblo por la Estrada da Fonte sin antes de escalar las ruinas del antiguo castillo y capilla. Con Alter Pedroso en la espalda seguimos por la Estrada de Pedroso, dejando la señal que indica giro a la derecha, seguimos por la carretera hasta Alter do Chao.




  • Más información del Caminho Nascente dos Caminhos de Santiago. AQUÍ
  • Enlace a la entrada del Castelo de Alter do Chao. AQUÍ
  • Enlace a la entrada del Castelo de Alter Pedroso. AQUÍ
  • Enlace a la entrada del Castelo de Cabeço de Vide. AQUÍ

 

sábado, 18 de octubre de 2025

Por Rincón de Ballesteros



Nos encontramos en la pedanía de Rincón de Ballesteros en el término municipal de Cáceres para hacer una bonita ruta en las estribaciones de la Sierra de San Pedro. Iniciamos la ruta hacia una escarpada colina donde está la Ermita de la Perenguana, hay que subir 205 escaleras hasta llegar a la ermita. Es moderna, construida con ladrillo y tras una verja de hierro está una imagen de granito de la virgen con el niño en sus brazos. Desde este alto se divisa la población de Rincón de Ballesteros, la dehesa y los embalses del Boquerón y de Horno Tejero, ya en la provincia de Badajoz. Preciosa vista de la dehesa. 




Durante el ascenso vemos la formación geológica Morras de Acebuches que pertenece a la Unidad de Carbonera-Clavín, cuenta con un espesor de 600 metros y se componen por conglomerados poligénicos y heterogranulares, con cantos de cuarcita en abundancia y de otras litologías en menor medida. Su matriz es pizarrosa rojiza y se intercalan con niveles de pizarras y grauvacas de extensión lateral variable. Son depósitos de ambiente subacuático, con oleaje e inversión de las corrientes. Se  interpreta como un paso a ambientes lacustres de grandes dimensiones en el que el oleaje alcanza cierta importancia, puede que incluso un medio marino somero.





Continuamos nuestra ruta por una pista hasta un nuevo afloramiento de esta formación, tras  visitarlo, continuamos por un camino que nos conduce de nuevo a Rincón de Ballesteros. 

La ruta son algo menos de seis kilómetros, de dificultad fácil, con unas vistas espectaculares, el track está disponible en WIKILOC.

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domingo, 21 de septiembre de 2025

Castillo de la Culebra

Castillo de La Culebra
 

Nos encontramos de nuevo en Alange para hacer esta bonita ruta de subida al Castillo de la Culebra. El ascenso se hace desde la localidad por la Calle del Castillo, una vez arriba disfrutamos de los restos de esta fortaleza así como de unas espectaculares vistas del entorno, del pantano y de la presa. El descenso se puede hacer por el mismo camino de subida, por el Camino de la Umbría o como hicimos nosotros en esta ocasión, por el Callejón del Fraile, un difícil descenso que se complica en algunos tramos, con mucha pendiente y material suelto y que nos condujo a la Presa de Alange, al aparcamiento, y volvimos al pueblo por el paseo del embalse. Una bonita ruta muy cerca de Mérida.


Alange

 Embalse de Alange

El acceso a la fortaleza se hacía desde dos calzadas, una ascendía hasta la Puerta del Sol y otra llegaba hasta la Puerta de los Gallegos o de Mérida. Constaba de dos recintos, desde la Puerta del Sol, donde el alcaide esperaba a los visitantes, se accedía por un sendero estrecho y abrupto hasta la Puerta del Corralejo que daba acceso al corral de caballerizas, con dos albercas, un aljibe y una casa con tahona. Por otra parte, el otro recinto importante al cual se accedía por la Puerta del Rastrillo ocupaba la parte más elevada del cerro con dos patios desiguales. El patio principal se encontraba pavimentado de ladrillo con una magnífica higuera en el centro, desde este patio se pasaba a un callejón en el cual se encontraba La Torre del Homenaje, realizada en ladrillo y mampostería será a la larga el emblema del castillo, y su silueta continua dominando desde la elevada atalaya todos los territorios del entorno, recordando la importancia estratégica del enclave.

 Torre del Homenaje

Esta magnífica fortaleza fue de vital importancia para la zona pues con frecuencia surgían sublevaciones contra Córdoba, en el año 875, Ibn Marwan, se subleva en Mérida contra el califato de Abderraman II y toma la fortaleza de Alange donde resiste el asedio del emir Muhamar, hasta que sucumbe e intercambia esta fortaleza por la Alcazaba de Badajoz. En el año 915  en plena reconquista, el Rey Ordoño II sitia, arrasa la fortaleza y ocupa la villa. En años sucesivos el castillo pasa de manos cristianas a musulmanas varias veces, hasta que en 1234 es reconquistado por Don Rodrigo Iñiguez, maestre de la Orden de Santiago y sus caballeros (se puede ver en la iglesia de la localidad la cruz de la Orden de Santiago en lugar principal). Y el castillo pasa a manos de la Orden de Santiago por mandato de Fernando III El Santo. Alange se constituyó en Encomienda y el ámbito jerárquico del mismo comprendía Villagonzalo, La Zarza, Oliva de Mérida, Palomas, Puebla de la Reina, Puebla del Prior y Ribera del Fresno. Ya a mediados del siglo XVI siendo comendador D. Enrique de Toledo y dado el mal estado del castillo se abandonó definitivamente. Una fantástica historia de este lugar de importancia estratégica que podemos visitar y que poca gente conoce.




La Puerta de los Aljibes, primer paso de la muralla por la parte de levante, servía de acceso al primer recinto amurallado del castillo, esta primera muralla estaba destinada principalmente a la protección de los aljibes que surtía de agua a la fortaleza. Se accede mediante un arco rebajo y apuntado y a cuyo lado existía una pequeña dependencia de la cual quedan algunas partes de los muros. Se accede a un aljibe frente al cual aún se puede observar una tronera.



Puerta de los Gallegos o de Mérida, el nombre de Puerta de los Gallegos viene del sobrenombre de Ibn Marwan, llamado al-Yilliqui "El Hijo del Gallego". Permitía el acceso de aquellos que llegaban desde Mérida. Es una "puerta en recodo" para hacer más vulnerables a los que pretendían acceder a la fortaleza en caso de ataque.









sábado, 6 de septiembre de 2025

Alcochete


A solo 20 minutos de Lisboa, Alcochete es un bonito destino que pasa desapercibido para los turistas, pero que esconde verdaderos tesoros. Situada a orillas del río Tajo, esta pintoresca villa marinera ofrece una combinación de historia, cultura, gastronomía y naturaleza. En nuestra opinión es una excelente opción para quienes buscan una escapada auténtica cerca de Lisboa.

Pasear por el centro histórico de Alcochete, donde cada esquina parece contar una historia, es un verdadero placer. El punto de partida debe ser Largo do Rossio, el corazón del pueblo, caminamos por sus calles con las casas típicas de colores pastel, adornadas con azulejos y pórticos. Otro lugar para visitar es la Igreja de São João Batista, una iglesia del siglo XVI, declarada Monumento Nacional en 1910 y el Mercado Tradicional que ofrece productos frescos y artesanales, desde pescado y mariscos hasta quesos y embutidos.




Además es especialmente conocido por sus platos de pescado fresco que puedes degustar en uno de los muchos restaurantes tradicionales que encontramos en el pueblo, sobre todo las sardinas asadas que inundan con su olor cada rincón del centro histórico.

Salinas do Samouco. Sin duda uno de los lugares más tranquilos y únicos de la región, donde la práctica de la salicultura sigue viva, aún existe una explotación de sal en activo que puedes visitar. Aquí, podrás caminar a lo largo de los senderos que recorren la zona, observando las aves migratorias que habitan la Reserva Natural del Estuario del Tajo, como el flamenco rosa. Un paraíso natural de 360 hectáreas que se remonta al siglo XIII y que fue el principal productor de sal de Portugal.  




La Praia dos Moinhos debe su nombre a los molinos de viento (ahora desactivados) en la playa de arena, otro de esos paseos que merece la pena en Alcochete. Para finalizar el viaje y antes de volver una parada en Freeport Lisboa Fashion Outlet, situado en la entrada del pueblo, es uno de los outlets más grandes de Portugal.



jueves, 4 de septiembre de 2025

14 Lugares que ver en Verona


Nos encontramos en uno de los rincones más bonitos de Italia: Verona. Una encantadora ciudad que es archiconocida por ser la ciudad de Romeo y Julieta, pero en esta entrada queremos descubrir una Verona más allá de estos dos pintorescos personajes. Una joya del norte de Italia, ubicada en la región de Véneto, que es un destino que combina historia, arquitectura y gastronomía. Una ciudad con más de 2000 años de historia que conserva un rico legado arquitectónico de época romana, renacentista y medieval, en el que destacamos y en verdad nos sorprendió, su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad. Para nosotros fue una ciudad que nos encantó, pasear por su centro histórico y descubrir cada rincón de la bonita Verona ha sido toda una experiencia. Destacamos estos 14 lugares imprescindibles.

1. Basílica de San Zenón.

Comenzamos más allá del Río Adige, el Barrio de San Zeno visitando esta basílica, el edificio religioso más famoso de la ciudad y que según Shakespeare, fue el lugar donde se casaron en secreto Romeo y Julieta. Fue construida y reconstruida entre el siglo V y el siglo XII, esta iglesia románica impresiona por su fachada en la que destaca un rosetón y un precioso pórtico flanqueado por 18 bajorrelieves que datan del siglo XII. El interior no se queda atrás en belleza gracias a varios frescos de la Edad Media y la cripta del siglo X. 



2. Convento de San Bernardino.

Seguimos caminando hacia el centro de la ciudad y encontramos el Convento de San Bernardino que se construyó dos años después de la canonización del santo en 1452, a petición expresa de los ciudadanos de Verona. El complejo incluye cuatro claustros, siendo el mayor el de San Antonio, que sirve como cementerio. La iglesia, construida completamente en ladrillo, es un edificio típico de sobriedad formal y simplicidad estructural de la arquitectura de las órdenes mendicantes.


3. Castelvecchio.

Se trata de un castillo medieval del 1354, ubicado a orillas del Río Adige, a pocos metros del Arco dei Gavi, es otro de los imprescindibles de Verona. De estilo gótico y construido en ladrillo rojo, este castillo destaca por sus siete torreones y por albergar el museo más importante de la ciudad, que tiene una colección con numerosas esculturas, pinturas, armas, cerámicas y piezas de oro, que van del siglo XII al XVII.

Conectado al castillo se encuentra el fantástico Puente Fortificado de Castelvecchio o Scaligero, construido para que la poderosa familia Scaligeri, que gobernó Verona desde 1260 a 1387, pudiera huir en caso de revueltas.



4. Arco dei Gavi.

El Arco dei Gavi es uno de los monumentos Romanos que aún persisten en el centro histórico de Verona. Fue construido alrededor de la mitad del primer siglo después de Cristo por la familia de los Gavi, la cual, aunque de origen plebeyo, disponía de un importante patrimonio que les permitió construir este bellísimo monumento en el punto en que la via Postumia entraba a la ciudad y que era la principal arteria Romana del norte de Italia uniendo Aquilea, el principal puerto del mar Adriatico, con Genova.


5. Arena de Verona.

Entrar en La Arena, uno de los anfiteatros mejor conservados de la Antigua Roma y declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, es una de las cosas más impresionantes que se pueden hacer en esta ciudad y además tuvimos la fortuna de asistir a la ópera Carmen en este maravilloso lugar, sin duda una experiencia que nunca olvidaremos y que recomendamos.

Para aquirir las entradas, en la web de Arena di Verona.

Esta maravilla arquitectónica, construida en el año 30 d.C. y con capacidad para 30.000 espectadores mantiene aún sus arcos exteriores de la época en la que se celebraban grandes espectáculos y juegos, así como los asientos originales, aunque está algo transformado para recibir conciertos, teatro y ópera. 




6. Via Giuseppe Mazzini.

Situada en el corazón del centro histórico, conecta las dos plazas más importantes de la ciudad, Piazza Bra y Piazza Erbe, es la calle comercial peatonal de lujo en el centro histórico de Verona, ofreciendo tiendas de moda, cafés y con una arquitectura veneciana. La primera parte de la calle, que parte de Piazza Erbe , sigue perfectamente lo que fue el segundo decumanus derecho de la Verona romana.

7. Casa de Julieta.

Es el monumento de Verona más visitado, y su famoso balcón. Este palacio de principios del siglo XII, transformado en museo y situado en la bonita Via Cappello, es el escenario de la famosa escena donde Julieta le juraba amor eterno a Romeo.

Lugar siempre lleno de gente, sobre todo el patio, para entrar en el palacio y subir al balcón hay que pagar y aunque esta bien decorado con mobiliario antiguo, varios cuadros de la obra de Shakespeare y vestidos utilizados en la película “Romeo y Julieta”, en nuestra opinión no merece la pena entrar, con pasar al patio es suficiente.



8. Piazza delle Erbe.


La Plaza de las Hierbas, es la plaza más antigua y una de las más bonitas que ver en Verona. Sus orígenes se remontan muchos siglos atrás cuando era el foro romano y concentraba la vida política, social y económica de la ciudad. Lo primero en lo que te fijas al entrar en la plaza es en la alta Torre Lamberti, que domina el casco antiguo de Verona. Otro de los monumentos más famosos de esta plaza y el más antiguo, es la Fuente de Madonna, datada en el año 380.

Entre los edificios históricos más destacados que rodean la Piazza delle Erbe está el Palacio de la Razón, el Palacio Maffei de estilo barroco, las Casas Mazzanti que destacan por sus frescos pintados en su fachadas, la Domus Mercatorum o Casa de los Mercaderes y la Torre del Gardello, que tiene uno de los relojes mecánicos más antiguos de Europa.

Un lugar perfecto para hacer una parada, comer o tomar algo en alguna de sus numerosas terrazas y recorrer los puestos de su mercado de frutas y verduras.


9. Domus Mercatorum.

O Casa dei Mercanti, es un edificio medieval ubicado en la Piazza delle Erbe. Durante la Edad Media albergaba la Casa dei Mercanti, el gremio de comerciantes de la ciudad, mientras que hoy alberga la Banca Popolare di Verona. El edificio se construyó en madera en 1210 para albergar la asociación local de comerciantes. En 1301, Alberto I della Scala, pocos años antes de su muerte, los mandó reconstruir en piedra, especialmente concebido como centro de comercio de lana.

Sufrió varias restauraciones hasta que, a finales del siglo XIX, fue restaurada provisionalmente a su aspecto medieval original. Actualmente cuenta con un pórtico sostenido por columnas y pilastras, y una fachada con ventanas geminadas y almenas.


10. Torre Lamberti.

Es una antigua torre medieval de 84 metros de altura, otro de los imprescindibles que visitar en Verona. Esta torre, cuya construcción se inició en el año 1172, tiene dos campanas: la Marangona, que todavía toca cuando se produce un incendio y para marcar las horas del día; y la Rengo, que se utilizaba para llamar a la población a las armas o para convocar los Consejos de Verona.

Muy recomendable subir a lo más alto en ascensor o por sus escaleras para disfrutar de las mejores vistas del centro histórico de Verona.


11. Piazza dei Signori.

Otra de las plazas bonitas que ver en Verona es la Piazza dei Signori, que rivaliza en belleza con su vecina Piazza delle Erbe y que fue el centro de poder de la familia de los Scaligeri, durante la Edad Media. Un espacio rodeado por los palacios de los Scaligeri y en el centro, una estatua en honor a Dante, que vivió varios años en esta ciudad. Entre los edificios más importantes se encuentran el Palacio del Consejo, el Palacio del Capitán, el Palacio de Cansignorio, el Palacio de Cangrande y el Palacio de la Razón.


12. Duomo.

Catedral de Santa María Matricolare, destaca por una fachada tripartita con un magnífico pórtico y una torre que combina diferentes estilos arquitectónicos, mientras que el interior está decorado con frescos y columnas de Mármol Rosa de Verona, que sostienen bóvedas góticas.


13. Cruzar el Puente de Piedra.

Construido en el siglo I sobre el Río Adige, este puente es el monumento romano más antiguo de la ciudad, y aunque fue bombardeado por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, se reconstruyó con las piedras originales. Cruzamos
 los 100 metros del Puente de Piedra y tomamos el Funicular para llegar al Castillo de San Pietro, que se encuentra situado situado en una posición estratégica, en lo alto de una pequeña colina. Aunque no se puede visitar, merece la pena pasear por sus jardines y acercarte al mejor mirador de Verona, con unas vistas de la ciudad impresionantes.




14. Teatro Romano.

Descendemos del Castillo de San Pietro caminando y llegamos al Teatro Romano de Verona, otro de los edificios más importantes de la época del Imperio Romano. Este teatro al aire libre, construido en el siglo I a. C., no se mantiene en tan buen estado como el anfiteatro, ya que se edificaron varios edificios encima. Después de ser redescubierto en el siglo XIX, se recuperaron varias partes de la construcción como la cávea y el graderío, convirtiéndolo en un teatro de verano para la ciudad.