viernes, 20 de enero de 2023

Cueva de Maltravieso

Primero quiero agradecer a mi compañero de viaje por darme esta oportunidad para escribir mi experiencia en la visita a la Cueva de Maltravieso, y que gracias a él pude disfrutar al ser una de los cincos afortunados. Él era el siguiente, pero como era de prever ninguno rechazo esta experiencia.

HISTORIA

La cueva fue hallada en 1951 cuando, con la realización de unas obras para la extracción de piedras en una cantera caliza, se descubre una oquedad en la que se encontraron algunos trozos de cerámicas y varios cráneos, uno de ellos trepanado, que fueron considerados como de época neolítica.

En 1956, Carlos Calleja, que por aquel entonces era el conservador del Museo Provincial de Cáceres, descubre la existencia de una serie de manos pintadas y grabados en la pared de la cueva que nos llevaría a las mismas entrañas del periodo Cuaternario.



Carlos Calleja da conocer este descubrimiento con una pequeña obra “La cueva prehistórica de Maltravieso”. Consiguiendo que en 1963 la declarasen Monumento Histórico Artístico Nacional.

Numerosos investigadores han puesto a Maltravieso en todos los tratados de Prehistoria: el arqueólogo, Martín Almagro Bash; el arqueólogo Eduardo Ripoll, y su hijo Sergio Ripoll, el arqueólogo extremeño Hipólito Collado.

En 1999 Eduardo y Sergio Ripoll e Hipólito Collado publicarían: “Maltravieso. El santuario extremeño de las manos”.



En febrero de 2018 la revista Science publicaba una investigación en la que se atesoraba que las pinturas de la cueva de Maltravieso son las pinturas rupestres más antiguas documentadas hasta la fecha a nivel global, con una antigüedad de hasta 66.700 años, (unos estudios recientes las datan de más de 90.000 años), siendo sus autores los Neandertales.



LAS MANOS

Las huellas de manos se hicieron con la acción de soplar pigmento rojo sobre la mano que estaba apoyada en la pared. Otras representaciones que aparecen en la cueva son motivos simbólicos: triángulos, series de puntos en los que fue utilizado el color negro. Además de estas representaciones aparecen otros motivos de carácter figurado, fundamentalmente, animales entre ellos caballos y toros.



La cueva ha sufrido desde el principio grandes deterioros que han provocado que el conjunto pictórico de grabados de Maltravieso se vea francamente dañado. En 2019 se reabrió después de veinte años cerrada al público dentro de un proyecto experimental para medir el impacto de las visitas en las pinturas y en el entorno de la cueva. Cerrándose posteriormente por la pandemia (COVID-19) hasta este 2022.

LA EXPERIENCIA

A las 10:45 horas del viernes 16 de diciembre de 2022 estábamos citados para comenzar nuestra visita en el Centro de Interpretación de la Cueva, situado en el parque del mismo nombre junto a la cueva, siendo recibidos por Lucia, y por Celia, arqueóloga que fue nuestra magnifica guía.

De los cincos afortunados, cuatro de Cáceres, de los cuales dos ellos recordaron viejos tiempos de su infancia y juventud, cuando la cueva no estaba protegida.

Lo primero que vimos fue un video monográfico de la historia la cueva.

Ataviados con un buzo XXXL y el casco con iluminación, nos dirigimos a la entrada de la cueva, donde nos facilitan unos guantes y nos desinfectan el calzado, para iniciar nuestro viaje por el túnel de tiempo recorriendo las salas de los huesos, las columnas, la mesita, la serpiente, hasta llegar a la entrada de la sala de las chimeneas. Gracias compañero por esta experiencia única difícil de olvidar. Te quiero.



Nines

Unas semanas después he sido también afortunado en el sorteo que se celebra semanalmente para la visita a la Cueva de Maltravieso, este auténtico tesoro en la ciudad de Cáceres. Una de las experiencias más importante de los últimos años. Te encuentras ahí con cinco personas más, a oscuras, tan solo la luz de los frontales, ante esta maravilla, pierdes la noción del tiempo y casi del espacio. En cuanto a la cueva, ya Nines la ha descrito perfectamente.

No quiero cerrar esta entrada sin darle de nuevo las gracias a Celia, por su simpatía y por hacer la visita tan amena y didáctica.